lunes, 25 de enero de 2010

Animal de monte

De luces y brillos se viene el atardecer contrariado por la impertinencia de las palabras mal encajadas, hasta que se cansa de esperar y se duerme con la idea de velar hasta ver otra vez el sol maravilloso lleno de perfume anaranjado que enciende ese corazón de animal de monte que llevo dentro, un venado o una pantera no lo sé, pero así retumba el sístole y el diástole en mi interior y me recuerda que es mejor morir libre corriendo por mi mundo, a quedarme el resto de la vida encadenado en la oscuridad de una celda húmeda y severa.

1 comentario:

tiemposuficiente dijo...

morir libre en mi mundo a vivir enjaulado, buen pensamiento, me agrada