martes, 26 de junio de 2012

Un mal día comenzamos la distancia.
La luna sólo pudo taparse los ojos para dejarnos ir.
Olvidamos el camino de regreso.

Hubo un tipo de noche que nos caló más,
pero ya la olvidamos, ya no figura en las neuronas.
Hoy caminamos por un sendero que no lleva a ninguna parte,
en los brazos de la fiebre, con el recuerdo implacable,
buscando un conección que no va a volver nunca.