Doblando la esquina me encontré con tu silencio.
Dejaste una estela de sollozos, una carta en la basura y un saldo en contra.
Así es la soledad, no sabe de compromisos.
Me quedé.
Aprendí a bailar solo, la danza del olvido.
Hace 4 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario