martes, 5 de julio de 2011

El eco tiene la culpa de todo. Nos hace creer que hay alguien más del otro lado y nos hace seguir esperando.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Tener la conviccion de que alguien te espera, es lo peor que te puede pasar.
Al abrir la puerta me di cuena que era demaciado tarde, la vi llorar tantas noches por mi culpa que nunca pense que dejaría de amarme.

Anónimo dijo...

Cuando tienes la "convicción" de quién es esa persona y que es lo que te espera con ella, no hay ningún arrepentimiento de no abrir. Saludos.

Anónimo dijo...

Toda la razón anonimo, y en ese caso se agradece el hecho que ni busque la puerta! saludos anonimos!¡!